La Reina de la Oración: El Santo Rosario

El Santísimo Rosario y otros rosarios transmitidos por el Cielo

El Santísimo Rosario

La palabra Rosario significa "Corona de Rosas". La Virgen ha revelado a varias personas que cada vez que rezan un Avemaría le están regalando una hermosa rosa y que cada Rosario completo la convierte en una corona de rosas. La rosa es la reina de las flores, por lo que el Rosario es la rosa de todas las devociones y, por tanto, la más importante. El Santo Rosario se considera una oración perfecta, porque en él se encuentra la impresionante historia de nuestra salvación. En efecto, con el Rosario meditamos los misterios de la alegría, del dolor y de la gloria de Jesús y de María. Es una oración sencilla, humilde como María. Es una oración que todos podemos rezar junto a Ella, la Madre de Dios. Con el Ave María la invitamos a rezar por nosotros. La Virgen siempre accede a nuestra petición. Ella une Su oración a la nuestra. Por eso es cada vez más útil, porque lo que María pide siempre lo recibe, Jesús nunca puede decir que no a lo que le pida Su Madre. En cada aparición, la Madre celestial nos ha invitado a rezar el Rosario como arma poderosa contra el mal, para llevarnos a la verdadera paz.

¿Quién puede rezar el Rosario?

Cualquiera que conozca seis oraciones fáciles puede rezar un Rosario; también necesitarás conocer veinte Misterios en los que meditar mientras rezas. No es necesario que seas católico.

El orden de las oraciones

El Rosario comienza con la señal de la cruz † con las palabras"En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén"."Luego sigue el Credo de los Apóstoles (1), seguido de unPadrenuestro (2), tres Avemarías (3)(tradicionalmente ofrecidas para aumentar la fe, la esperanza y la caridad de los que rezan el Rosario), un Gloria ( 4) y, si se desea, la Oración de Fátima (4) A continuación vienen cinco misterios (I-V), cada uno de los cuales consiste en el anuncio del misterio, un Padrenuestro (2), diez Avemarías (3), un Gloria (4) y, si se desea, la Oración de Fátima (4). Concluye con la Salve a la Reina (5). Por favor, reza unas oraciones extra después de la Salve a la Reina por el Papa.

Cuentas del Rosario

Si no tienes cuentas del Rosario, puedes contarlas con los dedos. Contar las cuentas libera tu mente y te ayuda a meditar.

Oraciones para rezar el Rosario

El Credo de los Apóstoles (1)

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del Cielo y de la tierra; y en Jesucristo, Su único Hijo, Nuestro Señor, Que fue concebido por el Espíritu Santo, nació de la Virgen María, padeció bajo Poncio Pilato, fue crucificado; murió y fue sepultado. Descendió a los Infiernos; al tercer día resucitó de entre los muertos; ascendió a los Cielos, está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso; desde allí vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo, en la santa Iglesia católica, en la comunión de los santos, en el perdón de los pecados, en la resurrección de la carne y en la vida eterna. Amén.

Padre nuestro (2)

Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en tentación, y líbranos del mal. Amén.

Ave María (3)

Dios te salve, María, llena eres de gracia; el Señor es contigo. Bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén

Gloria (4)

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración de Fátima (4)

Oh Jesús mío, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno, lleva al cielo a todas las almas, especialmente a las más necesitadas de tu misericordia.

(*) Oración de la Divina Misericordia(4)

Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer Tu voluntad.

Salve Regina (5)

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. A ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos; y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh, clementísima, oh piadosa, oh dulce Virgen María!

Guía: Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios,
Todos: Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.

(Opcional)

Guía: Oremos.
Todos: Oh Dios cuyo unigénito hijo con su vida, muerte y resurrección nos alcanzó el premio de la vida eterna, concédenos a los que recordamos estos misterios del Santo Rosario, imitar lo que contienen y alcanzar lo que prometen, por el mismo Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

Oración por el Santo Padre (para la devoción privada)

Guía: Sobre esta Roca Él edificará Su Iglesia...
Todos: ...y las fauces de la muerte no prevalecerán contra ella.

Guía: Oh Madre del Redentor...
Todos:...Tabernáculo vivo de la Eucaristía, y Rosa luminosa del Cielo, con humilde confianza te pedimos que concedas al Santo Padre todas las gracias y bendiciones que le reserva la Santísima Trinidad desde toda la eternidad. Amén.

Guía: Ayuda a sus amigos...
Todos: ...convierte a sus enemigos.

Guía: San José...
Todos: ...ruega por nosotros. Amén.

Los Veinte Misterios

He aquí una breve enumeración y descripción de los veinte Misterios.

Los Misterios Gozosos

La Anunciación (I): El Arcángel Gabriel "anuncia" a María que concebirá al Hijo de Dios.

La Visitación (II): María visita a su prima Isabel, que está embarazada de Juan el Bautista.

La Natividad (III): Nace Jesús. ¡Aleluya!

La Presentación (IV): María y José "presentan" a Jesús en el Templo, donde se encuentran con Simeón.

El hallazgo en el Templo (V): Tras perderle, María y José encuentran al joven Jesús enseñando a los rabinos en el Templo.

Los Misterios Luminosos

El Bautismo en el Jordán (I): La voz del Padre declara a Jesús Hijo predilecto.

Las Bodas de Caná (II): Cristo transforma el agua en vino, Su primer milagro público.

El Anuncio del Reino (III): Jesús llama a la conversión (cf. Mc 1,15) y perdona los pecados de todos los que se acercan a Él.

La Transfiguración (IV): La gloria de la Divinidad resplandece en el rostro de Cristo.

La Institución de la Eucaristía (V): Jesús ofrece la primera Misa en la Última Cena con Sus apóstoles, estableciendo el fundamento sacramental de toda la vida cristiana.

Los Misterios Dolorosos

La Agonía en el Huerto (I): Jesús suda agua y sangre mientras reza la noche anterior a Su pasión.

La Flagelación en la Columna (II): Pilato hace azotar a Jesús.

La Coronación de Espinas (III): Los soldados romanos coronan la cabeza de Jesús con espinas.

El Transporte de la Cruz (IV): Jesús se encuentra con Su madre y cae tres veces en el camino hacia el Calvario.

La Crucifixión (V): Jesús es clavado en la cruz y muere ante Su madre y Su apóstol Juan.

Los Misterios Gloriosos

La Resurrección (I): Jesús resucita de entre los muertos.

La Ascensión (II): Jesús deja a los Apóstoles y "asciende" corporalmente al cielo.

El Descenso del Espíritu Santo (III): Los Apóstoles reciben el Espíritu Santo en lenguas de fuego en el Cenáculo con María.

La Asunción (IV): María es llevada corporalmente (asunta) al cielo por Dios al final de su vida aquí en la tierra.

La Coronación (V): María es coronada Reina del Cielo y de la Tierra.

Misterios para determinados días de la semana

Tradicionalmente, mucha gente reza los Misterios Gozosos el lunes, los Misterios Dolorosos el martes, los Misterios Gloriosos el miércoles, y vuelve a empezar con los Misterios Gozosos el jueves, los Misterios Dolorosos el viernes. Luego se rezan los Misterios Gloriosos el sábado y el domingo. Ahora que recientemente se han añadido los Misterios Luminosos, el horario es:

Lunes - Gozosos
Martes - Dolorosos
Miércoles - Gloriosos
Jueves - Luminoso
Viernes - Doloroso
Sábado - Alegre
Domingo - Glorioso

Intenta situarte "en" la escena del misterio concreto mientras rezas, imaginando las imágenes, los olores, los sonidos y las emociones que Jesús, María, José y los demás participantes experimentaron durante los acontecimientos reales.

También está bien meditar sobre el significado de las palabras de las oraciones mientras las rezas, o incluso meditar sobre la persona por la que ofreces el Rosario.

Ofrecer intenciones

Prácticamente todos los que rezan el Rosario "ofrecen" el Rosario a Dios y a la Virgen por una intención. Algunas personas ofrecen intenciones particulares antes de cada decena. Puedes pedir a Dios que te conceda un favor, que cure a un enfermo o que convierta a un pecador. Algunas personas ofrecen la misma intención todos los días -a veces durante años-, sobre todo cuando piden al Padre la conversión de una persona concreta. Las intenciones son tan variadas como las personas que rezan.

Pide grandes y pequeños dones. ¡Sé audaz! En este sentido, el Rosario es un intercambio de regalos entre amigos.

Es bien sabido que la Virgen responde a intenciones aparentemente imposibles a quienes empiezan a rezar el Rosario. Es su modo de acercarte a Ella y a Jesús. Si rezas tu primer Rosario, o vuelves al Rosario después de años sin hablar con la Virgen, pídele algo grande, espectacular, "imposible"... A menudo Ella te sorprenderá.

Merecer una Indulgencia Plenaria

La Iglesia Católica, ejerciendo su autoridad para "atar y desatar en el cielo y en la tierra", y en perfecto acuerdo con la Misericordia de Dios, ha establecido las siguientes condiciones para la concesión de la indulgencia plenaria a quienes recen el Rosario:

• Estar en estado de gracia, es decir, que tu alma esté libre de pecado mortal.
• Estar libre de apego -es decir, no tener hábito- al pecado venial.
• Confiésate varios días antes o después de rezar el Rosario.
• Recibe la Sagrada Comunión el día que reces el Rosario.
• Reza una oración por el Papa.

Cumpliendo estas sencillas (pero a menudo difíciles) condiciones, mereces la gracia de liberar un alma del Purgatorio. Aunque somos libres de pedir a Dios que aplique esta gracia a un alma concreta, Dios puede hacer lo que le plazca, según Su Voluntad y Misericordia. También puedes pedir a Dios que aplique esta gracia especial a tu propia alma. Una indulgencia plenaria aliviará el castigo temporal debido al pecado (no absolverá el pecado ni hará que el pecado sea perdonado).

(*) Nota sobre la Oración adicional después de las Pequeñas Cuentas

El 16 de abril de 2023, en un mensaje a Ned Dougherty, Jesús de la Divina Misericordia pidió que se incluyera esta oración en el Rosario y en Su Coronilla...

"Por último, te pido que repitas esta poderosa oración después de cada decena del Rosario y de cada decena de la Coronilla de la Divina Misericordia:"

"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer Tu voluntad".

"Si escuchas Mis palabras, compartiremos el paraíso en los Reinos Eternos con el Padre del Cielo, tu Madre Celestial, todos los Ángeles y Santos, y tus hermanos y hermanas en Cristo. Todo esto te lo prometo".

Mensaje a Ned Dougherty del 16 de abril de 2023

Origen del Santo Rosario