domingo, 17 de julio de 2022
Domingo 17 De Julio De 2022
Domingo 17 de julio de 2022
Jesús dijo «Pueblo mío, ya conocéis este Evangelio de Marta y María. Marta Me recibía y se preocupaba de los actos de hospitalidad proporcionando agua para lavar Mis pies y comida para la cena. María Me amaba mucho y prestó toda su atención a Mis palabras. María eligió la mejor parte porque quería estar cerca de Mí. Realmente quiero que Mi pueblo fiel sea como Marta y María. Deja que Yo sea el foco, o el centro de tu vida. Cuando te levantas por la mañana, Me saludas en oración y consagras todo lo que vas a hacer para Mí. Me das gracias por cada día de tu vida y cumples con tus deberes físicos y espirituales. Debes reservar un tiempo para tus rosarios diarios y tu Coronilla de la Divina Misericordia. Las personas que están cerca de Mí, empiezan el día con la Misa por la mañana. Haces tu trabajo en el jardín, o en tu empleo en una fábrica. Cuidas de tu familia, de tus hijos y de tu cónyuge, si estás casado. Hijo mío, se te ha pedido que hagas un poco más con tu Adoración nocturna a Mi Santísimo Sacramento. Al hacer todo por Mí, tus quehaceres diarios son como pequeñas oraciones que Me complacen. Sigue viviendo tu vida en torno a Mí, para que Yo esté muy familiarizado con quién eres. Así, cuando mueras y vengas al cielo, te acogeré como parte de Mi familia. Aquellas personas que no Me hagan partícipe de sus vidas, llegarán a su juicio, y Yo diré que no las conozco, y serán enviadas al infierno por no amarme y no arrepentirse de sus pecados.»
Jesús dijo «Pueblo mío, en el Evangelio de hoy habéis leído cómo llegué a casa de Marta y María para pasar la noche. Predicaba: 'El Reino de Dios está cerca'. Lo más importante es que escuchéis Mis palabras de vida eterna para vuestra alma. Ésta es la parte mejor a la que María eligió estar atenta, y no le será arrebatada. En la primera lectura, Abraham saludó a tres desconocidos que en realidad eran ángeles. Les proporcionó comida de su propio animal y les dio de beber. Entonces uno de los forasteros dijo a Abraham: 'Cuando vuelva, tu mujer Sara dará a luz un hijo'. Aunque Abraham y Sara no tenían hijos y ya no estaban en edad de procrear, Abraham creyó que Dios podía hacer lo imposible. Sara concibió y tuvo un hijo llamado Isaac».