Mensajes a María para La Divina Preparación de los Corazones, Alemania
miércoles, 24 de julio de 2013
El Tiempo Del Fin Se Acerca, Pero No Lo Veis.
- Mensaje nº 192 -

Hija mía. Mi querida hija. Buenos días. Siéntate Conmigo.
Lo que vives hoy en tu tierra no lo ha querido Dios Padre, pues Él, que es amor puro, también ha querido para ti el amor puro, pero apenas puedes vivirlo hoy en tu tierra, pues a través de la «apostasía» de Lucifer, que una vez fue uno de los ángeles más poderosos del reino de Dios, comenzó el pecado, pues a través del orgullo y del ego, de la arrogancia y de la desobediencia, este amor puro se contaminó hasta quedar irreconocible, y como Lucifer, más conocido como Satanás, como el diablo, quiso «gobernarse» a sí mismo, colocándose así por encima de Dios Padre, comenzó la dualidad del bien y del mal.
Puesto que Dios Padre es un Padre amoroso, concedió a todos el libre albedrío, en el que nunca intervendrá. Lamentablemente, sin embargo, debe observar cómo muchos de Sus hijos también dirigen su libre albedrío contra Él, el Creador de todo ser, y, como Lucifer, quieren hacerse con el poder para sí solos.
Que esto no puede salir bien, lo sabes hoy, y la magnitud del mal lo ves por todas partes en tu mundo. Sólo con Dios Padre puedes vivir feliz y contento. Sólo Él cuida de ti. Sólo Él puede darte lo que tu alma necesita para su bienestar. Así que vuelve a Él y dale la espalda al demonio y a todo el mal que te ha infectado.
En cuanto hayas dado tu Sí a Jesús, el demonio perderá poder sobre ti hasta que tenga que renunciar a él por completo, porque quien confiesa a Jesús y a Dios Padre, vive su vida contigo y la alinea a Ti, el demonio no puede hacerle daño en cuerpo y alma, porque Dios Padre es más grande que él.
Él es el único Dios verdadero. Sólo Él es todopoderoso, y sólo Él te protegerá. Por tanto, acércate a Él y dale la mano, pues Él te guiará, y eternamente feliz y en amor pacífico vivirás a Su lado.
Que así sea.
¡Tened valor, hijos Míos, y volved! Yo os amo.
Vuestra Madre del Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.
Amén, os digo esto: Sólo Mi Padre es todopoderoso.
Sólo con Él experimentarás la felicidad.
Sólo los que Me dan su Sí pueden ser salvados y liberados de las garras de la bestia.
Rezad, hijos Míos, rezad, pues vuestra oración es poderosa .
Que así sea.
Tu amado Jesús.
Salvador de todos los hijos de Dios.
Hija Mía. Es de suma importancia que Nuestros queridos hijos se arrepientan. El tiempo del fin se acerca, pero vosotros no lo veis.
Yo os amo.
Vuestro Padre que está en los Cielos.
Dios, el Altísimo.
Origen: ➥ DieVorbereitung.de
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