Mensajes a María para La Divina Preparación de los Corazones, Alemania
martes, 6 de noviembre de 2012
¡Hagan penitencia por los pobres pecadores!
- Mensaje Nº 1 -
Hijo mío, te amo. Eres uno de Nuestros hijos elegidos para transmitir Nuestros mensajes. Acepta tu sacrificio y ayúdanos.
Hagan penitencia por los pobres pecadores. No saben lo que están haciendo, especialmente contra Dios, Nuestro Padre, y no tienen mucho tiempo. Tú, hijo mío, serás salvado. Nos alegramos en ti y en tus oraciones. Todos los hijos que oran a Mi Hijo, a Nosotros, serán salvados. Te amamos. Permanece fiel a Nosotros. Cumple tus deseos en las cosas pequeñas y deja las grandes, todas las grandes cosas a Dios Padre, el Altísimo.
Has sido elegido, hijo mío, para hablar por Nosotros. Tu miedo está bien fundado en los tiempos de hoy, pero lo haces bien, todos lo hacen bien, al servirnos. Serás recompensado.
Hijo mío, ves lo solo que ya estás. La mayoría de las personas no creen en Nosotros, en Mi Hijo. Cometen crímenes graves y luego los justifican con Dios. Esto nos duele y sufrimos mucho por ello. Tú, hijo mío, nos das alivio en Nuestro sufrimiento y al mismo tiempo gran, inmensa alegría. Contigo hay muchos otros. Te amamos con todo Nuestro corazón y con el poder y la fuerza de Dios, porque solo Él es el verdadero Rey.
Ya no es suficiente para ti, los hijos perdidos, tener reyes, sino que "idolizan" a tus "ídolos", lo cual es una grave ofensa a Dios. Solo hay un Dios. Este Dios está lleno de amor, Él es el amor mismo, porque creó todo, también a ti, hijos míos, de "nada", y tuvo/tenía alegría en ti. Ahora Él sufre porque muchos de Sus hijos se han vuelto apóstatas y ya no Lo conocen. No es solo el rechazo, sino también el no conocer, lo cual es de nuevo una gran ofensa por parte de aquellos que no Lo han transmitido y Sus enseñanzas y no lo hacen hoy.
¡Oh hijos míos, si supieran cuánto daño están haciendo y cuántas gracias, a través del arrepentimiento de ustedes mismos o de otros, son necesarias para llevar este daño a la salvación. No pecarían más, si pudieran ver los tormentos de aquellos que cayeron (y luego "murieron") en desgracia ante Mi Padre
Te amo. Tu Jesús.
Nuestra Señora: Hijo mío, transmite esto. Te amo, tu Madre en el cielo.
Origen: ➥ DieVorbereitung.de
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