sábado, 2 de abril de 2022

Sábado, 2 De Abril De 2022

Sábado, 2 de abril de 2022

Jesús dijo: «Hijo mío, en el Evangelio la gente me preguntaba si yo era el Cristo, pero la mayoría de ellos no sabía que nací en Belén, lo cual está de acuerdo con las Escrituras. Como me crié en Nazaret, la gente pensó que había nacido allí. Soy verdaderamente el Hijo de Dios y he venido a esta tierra para ofrecer mi vida por el perdón de vuestros pecados. Hijo mío, te he llamado para preparar a Mi remanente fiel para la tribulación venidera del Anticristo, y la siguiente Era de Paz. También te he dado una segunda misión de preparar un refugio de protección para la gente que venga a tu refugio durante la tribulación del Anticristo. Hijo mío, estás escuchando una línea muy importante que te he repetido tres veces para que pudieras escuchar y entender. Hijo Mio, te estoy llamando a ser uno de Mis lideres de Mi remanente fiel en estos tiempos finales. Yo hare que Mis angeles te protejan a ti y a la gente, mientras tu guiaras a la gente en el refugio que Yo te he pedido que prepares. Otros constructores de refugios protegerán a la gente en sus refugios también. Tu estarás viajando a los varios refugios en bi-localización durante la tribulación. Confía en Mí y en todos los mensajes que te he dado para prepararte para este tiempo».

Jesús dijo: «Pueblo Mío, te estoy dando un anticipo de Mi Resurrección. Vosotros sabéis que la muerte no tuvo poder sobre Mí, y Yo he vencido a la muerte y al pecado. Soy victorioso sobre el pecado de Adán, así que cuando eres bautizado para ser cristiano, eres liberado del pecado original. Porque he vencido el pecado, puedes venir a Mí en la Confesión del sacerdote, y serás liberado de tus pecados por la absolución del sacerdote. He muerto en la cruz como ofrenda perfecta por todos los pecados de la humanidad. Así que aprovecha Mi regalo de salvación confesándote con frecuencia para mantener tu alma libre de pecado. Para venir al cielo, debes buscar Mi perdón con un corazón contrito, y amarme con mente, cuerpo y alma. Dejándome ser el centro de vuestras vidas, seréis dignos de venir al cielo. Pronto vendrá el Domingo de la Divina Misericordia, para que podáis hacer vuestra novena y rezar las oraciones de Santa Faustina, junto con la Confesión. Entonces recibirás la indulgencia plenaria que reparará cualquier pena debida por tus pecados. Este es el mejor regalo de Mí mismo que puedes tener para preparar tu alma para tu juicio.»