lunes, 19 de junio de 2017

Lunes, 19 De Junio De 2017

Lunes 19 de junio de 2017: (San Romualdo)

Jesús dijo «Pueblo mío, habéis visto la lluvia que riega vuestras cosechas. Puesto que el agua es necesaria para vuestra supervivencia, esta lluvia es como Mi gracia derramándose sobre vuestro pueblo. Estos pasos son para recordaros vuestro viaje por la vida para llegar al cielo. Cada hora y cada día te acercan un paso más a tu meta del cielo. Puede parecer mucho tiempo recorrer una vida en la tierra, pero mira lo rápido que has llegado a tu edad actual. El tiempo envejece a todo el mundo, y no te das cuenta de lo viejo que te estás haciendo, hasta que ves que tu pelo se vuelve gris y luego blanco. Tu tiempo en la tierra es limitado, y debes aprovecharlo al máximo en oraciones, misas y buenas acciones. No puedes llevarte tu dinero ni tus posesiones más allá de la tumba, por lo que necesitas proteger tu posesión más preciada, tu alma, del maligno. Tu destino debe ser venir a Mí en el cielo, porque fuiste hecho para conocerme, amarme y servirme en esta vida. Aquellos fieles que sigan Mis Mandamientos, se arrepientan de sus pecados y Me permitan ser el Maestro de sus vidas, tendrán su recompensa Conmigo en el cielo. Alégrate cuando hayas luchado un buen combate durante la vida, y hayas terminado el curso de tu vida, porque tu lugar te espera en el cielo».

Jesús dijo: «Pueblo mío, tu país está siendo puesto a prueba con olas de calor, lluvias torrenciales, tornados y una tormenta tropical. Durante los meses de verano, vuestro clima caluroso puede generar violentas tormentas de lluvia con granizo y tornados, que habéis estado viendo durante los últimos meses. El terreno de tu país forma más tornados que cualquier otro lugar del planeta. Las aguas oceánicas también se están calentando, dando pábulo a una nueva tormenta tropical en el Golfo de México. Podrían producirse lluvias torrenciales a lo largo de la costa del Golfo, con algunos daños por fuertes vientos. Se ha advertido a tu pueblo de que se prepare para salir si es necesario. Todos los años, estas catástrofes se cobran su peaje en vuestras casas y en las pérdidas de los seguros. Rezad por la seguridad de vuestra gente para evitar víctimas mortales. En algunas zonas llueve mucho más de lo normal y en otras hay sequía. Reza para que tus agricultores reciban suficiente lluvia para cultivar sus cosechas para tu alimentación».