lunes, 23 de enero de 2017

Lunes, 23 De Enero De 2017

Lunes, 23 de enero de 2017: (Protesta por el derecho a la vida de los no nacidos)

Jesús dijo «Pueblo mío, veis en el Evangelio la mención de Belcebú, el «Señor de las Moscas», que atacó vuestra capilla refugio. Cuando estéis luchando contra el demonio y los malvados, sabed que podéis contar conmigo para que os ayude, porque tengo poder sobre los demonios. Cuando luchas por salvar la vida de los no nacidos, luchas contra los demonios y los malvados que apoyan el aborto. Todas esas mujeres, que abortan a sus hijos, sufrirán en su juicio. Yo perdonaré el pecado, pero todavía hay que pagar una reparación por ese pecado. También las personas que apoyan el aborto son susceptibles de castigo. Todos Mis fieles, que luchan por salvar la vida de los no nacidos, recibirán su recompensa en el cielo. Enviaré a Mis ángeles para que te guarden y te guíen en tu viaje a la Marcha por la Vida el 27 de enero. No os preocupéis por el aparcamiento, porque Yo os ayudaré en lo que necesitéis. Todo lo que hagáis en oraciones y buenas acciones por los no nacidos, será bien apreciado en vuestros esfuerzos por salvar vidas. Recordáis bien cómo dijo Mi Santísima Madre: 'El mayor pecado de omisión es el de las personas que no rezan ni protestan contra los abortos'. Las vidas de Mis pequeños son demasiado preciosas para matarlas por cualquier motivo. Reza para que estas madres tengan a sus hijos. Los bebés no nacidos son dones de vida que el diablo intenta arrebatarles. Rezad para que se detenga el aborto, porque vuestras oraciones serán escuchadas algún día».

Jesús dijo: «Pueblo mío, quiero continuar Mi mensaje a América sobre detener la matanza de Mis bebés por vuestros abortos. ¿Cómo podéis no ver que Mis bebés son pequeños milagros y que los padres tienen derecho a unirse a Mí para crear una nueva vida? Todos tenéis que comprender lo preciosa que es la vida, ya sea en el vientre materno o cerca de la muerte. Me horroriza tanto vuestro desprecio por la vida al permitir que se aborte a vuestros bebés. No se trata de una cuestión antigua, sino de una cuestión importante en todo momento. Vuestras madres deben amar a sus hijos y no matarlos. Este asesinato de los bebés no nacidos es un pecado mortal, y me ofende enormemente que el aborto sea una cuestión de derechos. El bebé es diferente de la madre, y no es una elección matar al bebé o no. No se debe matar al bebé en absoluto. A veces tengo que taparme los ojos para no ver vuestros abortos. Pero los ángeles de la guarda de estos pequeños mártires vienen a Mí para hablarme de la muerte de Mis pequeños. Sólo vuestros abortos hacen caer Mi ira sobre vuestro país. Cuando traiga Mi Advertencia como intervención Mía, cada madre de un bebé abortado sabrá exactamente el tipo de vida que su hijo estaba destinado a vivir. Habrá un gran lamento cuando vean el asesinato de su bebé en la revisión de su vida. Perdonaré este pecado si las partes se arrepienten y buscan Mi perdón. Intenta aconsejar a estas mujeres que no aborten, sino que lleven a su bebé a término. Os amo a todos y quiero que améis a todas Mis creaciones de vida».