sábado, 12 de mayo de 2018

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

Hoy llegó la Santísima Madre, mostrándonos su Corazón Inmaculado que brillaba fuertemente en su mano derecha. El Corazón Inmaculado de María está lleno de amor por nosotros, sus hijos e hijas. Ella desea ardientemente nuestra salvación y felicidad eternas. Al mostrarnos su Corazón materno, la Virgen nos invita a entregar nuestro corazón a Dios y a confiar en el poder de su intercesión ante el Trono de Dios. Ella nos dice

¡Paz, mis amados hijos, paz!

Hijos míos, yo, vuestra Madre, vengo del cielo con mi Corazón Inmaculado en la mano, para pediros que abráis vuestros corazones al amor de Dios.

Entregad vuestros corazones al Señor, hijos míos, para que se llenen del amor y de la paz de mi Hijo Jesús.

Rezad para ser de Dios. Rezad para que tengáis la fuerza de vencer toda tentación y pecado. Pedid a mi Hijo Jesús la gracia de su Espíritu Santo, para que os inflame el fuego divino que calentará vuestros corazones y os liberará de toda frialdad espiritual.

El demonio trabaja duro para llevar a las almas a la condenación eterna y utiliza a muchos de mis hijos para querer destruir las obras de Dios, pero rezad y ayunad, ayunad y rezad, y todo mal será destruido.

Os acojo en mi Corazón Inmaculado y os bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Antes de partir, la Santa Madre me dijo

Di a mis hijos que estén siempre en gracia de Dios, viviendo alejados del pecado. Quien vive en pecado no agrada a Dios. Confesaos y liberaos del pecado, para que merezcáis las bendiciones de Dios y las gracias del cielo.