martes, 28 de noviembre de 2017

Martes, 28 De Noviembre De 2017

Mensaje de Dios Padre dado a la vidente Maureen Sweeney-Kyle en North Ridgeville, EE.UU.

Una vez más, yo (Maureen) veo una Gran Llama que he llegado a conocer como el Corazón de Dios Padre. Dice: "Yo soy el Padre Celestial, Sustentador y Creador de toda vida. He elegido estos tiempos para hablar al mundo, pues veo que Mi Remanente lucha por mantener la fe de tantos. A medida que vosotros, querido Remanente, apoyéis las Verdades de la Fe, Yo os apoyaré -manteniendo siempre una relación cautelosa con aquellos que buscan y necesitan Mi Protección."

"No temas la controversia. El cambio surte efecto a través de la controversia. Los corazones deben ser desafiados para que el mal pueda ser expuesto. Así es como la Verdad se alzará con la victoria».

"Las Verdades de la Fe se han visto tan comprometidas que el pecado ya no se define en interés de la salvación. La unidad en la Verdad es descabellada, pues incluso los buenos se oponen a los buenos. Así pues, vengo una vez más, para sentar los cimientos de la Verdad ante el corazón del mundo. Escucha Mis Palabras. Existen el Cielo y el Infierno. Existe Satanás, que existe para robarte tu salvación. Existe el bien y el mal. Si no evitas el mal -si no obedeces Mis Mandamientos- pasarás tu eternidad en el Infierno».

"Por tanto, aprende la diferencia entre el bien y el mal. Elige el bien. Ámame a Mí por encima de todo y a tu prójimo como a ti mismo».

"Miro dentro de cada corazón. Así juzgo a cada alma. Asegúrate de que tu corazón apoya la Verdad».

Lee Hebreos 12:14+

Lucha por la paz con todos los hombres y por la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.

Leer 2ª Tesalonicenses 2:13-15+.

Pero estamos obligados a dar siempre gracias a Dios por vosotros, hermanos amados por el Señor, porque Dios os eligió desde el principio para salvaros, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la Verdad. A esto os llamó por medio de nuestro Evangelio, para que alcancéis la gloria de nuestro Señor Jesucristo. Así pues, hermanos, manteneos firmes y retened las Tradiciones que os enseñamos, de palabra o por carta.