miércoles, 30 de noviembre de 2016

Llamamiento Urgente de Jesús Del Santísimo Sacramento A. Humanidad.

¡Hijos Míos, Rezad por Mis Sacerdotes y Ministros, porque muchos se están perdiendo por la impureza, la Nueva Era y las comodidades y preocupaciones de este mundo!

Mi paz sea con vosotros, hijos Míos. Mi adversario ha desplegado espíritus de división para traer separación y confusión en las familias y en la humanidad. Rezad, hijos míos, con el Rosario de mi Preciosa Sangre, para que podáis contrarrestar estos ataques. El poder de mi Sangre es terror para los demonios y liberación para mi pueblo fiel; en ningún hogar cristiano católico debe faltar el Rosario de mi Preciosa Sangre, porque es de gran ayuda y protección para mi pueblo en la batalla espiritual de cada día.

Después del Rosario de mi Madre, rezad el Rosario de mi Preciosa Sangre y os aseguro que las fuerzas del mal no podrán tocaros, ni haceros ningún daño. Consagraos al poder de mi Sangre mañana y noche y haced extensiva la consagración a vuestras familias, parientes, amigos y al mundo entero en general, para que podáis permanecer victoriosos. Padres, os pido que cubráis a vuestros hijos con mi Sangre y los bendigáis, ¡porque la bendición de un padre sobre sus hijos tiene un gran poder y es agradable a los ojos de Dios!

Venid a Mí, con confianza, no tengáis miedo; ¡la indiferencia de muchos me duele tanto! Aún estoy con vosotros, pero se acerca el día en que ya no estaré en el silencio y la soledad de mis Sacramentos. Aprovechad y venid a visitarme y os aseguro que al salir de mi Casa no quedaréis defraudados; Yo soy la solución a todos vuestros problemas; no busquéis ayuda en los hombres, ni en dioses extraños, porque Yo soy vuestro único y verdadero Dios. Acércate a mi Casa porque las puertas están abiertas; quiero que charlemos como buenos amigos. Recordad que tengo más que daros que lo que vosotros tenéis que pedirme.

Hijos míos, rezad por Mis Sacerdotes y Ministros, porque muchos se están perdiendo por la impureza, la Nueva Era y las comodidades y preocupaciones de este mundo. Adoptad espiritualmente a un sacerdote y rezad por él, porque Mi adversario les está atacando y muchos están con los ojos vendados y confundidos. Hay muchos de Mis hijos predilectos practicando la Nueva Era dentro de mis Iglesias y lo más triste, haciéndolo pasar como si fuera divino. Muchas almas están siendo contaminadas por el uso de estas prácticas paganas practicadas por algunos de Mis hijos favorecidos. Ninguna práctica de Reiki, yoga, meditación o canalización viene de Mí. Mi Espíritu Santo en esencia es Vida que se te da, si se lo pides a Mi Padre con fe. Mi Espíritu Santo no necesita ser canalizado, Él habita en los corazones nobles, humildes y sencillos y en todos aquellos que hacen la voluntad de Mi Padre. Tened cuidado, hijos Míos, no dejéis que os impongan las manos los sacerdotes que utilizan estas prácticas; ¡tened mucho cuidado porque abundan muchos falsos sacerdotes que dicen ser canalizadores de energía!

El yoga, los péndulos, la hipnosis, la regresión, el reiki, la canalización, la metafísica, las piedras, el mentalismo y cualquier otra práctica que pretenda sanar con energía no es compatible con Mi doctrina y no procede de Mí, sino de Mi adversario. Así pues, tened cuidado, rebaño mío, porque el lobo se mueve por ahí, vestido con piel de cordero y disfrazado de ángel de luz. Pedid a Mi Espíritu Santo mucho discernimiento y probad los espíritus, porque el gran engañador anda suelto y busca que muchos y aun muchos de mis elegidos se pierdan. Sed prudentes como serpientes y mansos y humildes como palomas; Orad en todo momento para no caer en la tentación, porque las tentaciones invaden este mundo y están haciendo caer a muchos. Por tanto, caminad como hijos de la luz y utilizad todas las armas espirituales que os hemos dado, para que salgáis victoriosos en el combate espiritual de cada día.

Mi Paz os dejo, Mi Paz os doy. Arrepentíos y convertíos, porque el Reino de Dios está cerca.

Vuestro Maestro, Jesús Sacramentado. Hijos míos, dad a conocer Mis mensajes a toda la humanidad.