lunes, 1 de septiembre de 1997

Mensaje de Nuestra Señora

Queridos hijos, esta brisa que sopla ahora es para ustedes, una confirmación de que estoy aquí. Siempre les dije que cuando una brisa suave sople sería una señal de que Su Madre está presente.

¡Estoy aquí todos los días! Todas las señales que ven en la cima de esta Montaña son Mías, para mostrar que me alegro y estoy muy feliz cuando vienen aquí a estar cerca de Mí.

¡Les agradezco y les pido al grupo de oración que estos días oren como nunca antes, porque este 7 de septiembre será muy especial, y verán muchas señales, especialmente conversiones de personas, y un mayor número de personas aquí, porque ahora voy a actuar con fuerza y quiero actuar!

¡Prepárense con mucha oración! Oren más, mucho más esta semana porque queremos actuar más que nunca. Les pido que confíen en Mí y no den paso al miedo en su corazón. Así que oren, ¡oren mucho! Yo oraré por todos.

Este próximo 7, daré una Bendición Especial a todos ustedes los que vengan aquí. ¡Quiero muchos jóvenes, muchos de Mis hijos en esta Mi Montaña! Tocaré a todos los que abran sus corazones a Mí y a Mi Hijo, porque Él pasará entre ustedes. Todos ustedes deben orar e interceder mucho, para que estos corazones de piedra se abran a Mí.

Les pido a todos que oren por la conversión de la humanidad, y que difundan Mis Mensajes por todas partes. No solo los escuchen. ¡Pásenlos! Quiero que los difundan por toda la ciudad y en todas partes! ¡Quiero muchos niños aquí! Les pido que oren e intercedan para que esto suceda pronto.

Los bendigo en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo."